Despertaron
mis ojos a la mañana,
al
resplandor del sol en nuevo día,
ver
las mariposas en su osadía,
en
requiebros de una cortesana.
Sus
alas, en mi jardín engalana.
A
las petunias, su coquetería,
explotando
el color en armonía,
y
el olor inunda hasta mi sabana.
El
cielo, me anuncia la primavera,
el
sol, me está inyectando energía,
la
noche se me hace placentera.
En
contacto, y en plena sintonía,
el
cielo como una cristalera,
bebiendo
primavera me veía.